La Junta Birmana ha vuelto a prorrogar por un año el arresto domiciliario de la opositora birmana Aung San Suu Kyi, la ya llamada Nelson Mandela de Asia e hija del héroe de la independencia contra los británicos. Cientos de birmanos se han atrevido a protestar hoy en Rangún y sabemos que la policía ha colocado alambradas en torno a la casa de la Premio Nobel de la Paz 1991. Detenida desde 1990, con breves periodos de libertad, Aung San Suu Kyu mantiene su ánimo fuerte a pesar de estar viviendo completamente aislada del exterior (no se le permiten visitas ni llamadas teléfonicas).